Tuve una noche de despertarme varias veces, algo raro en mi. A las 06:00 me desperté y me puse a mirar que hacer. No tenían más habitaciones disponibles en el hostal que estaba y decidí que era el momento de marcharme de la isla. Compré el ticket para coger el ferry a las 09:30 y me fui a dormir de nuevo.
Me desperté más tarde y salí del hostal para andar los 15 minutos al ferry. Pensé en desayunar por el camino, pero ya no me daba tiempo. Me fui al puerto y me monté en el ferry. El ferry iba a tardar 3,5 horas ya que también hacía parada en la otra isla que ya estuve, Koh Pha Ngan.
A las 13:00 llegué al puerto de Koh Samui. La isla es la segunda isla más grande de Tailandia, después de Phuket. Durante el ferry me había cogido un hostal para dos noches en la parte este de la isla. Por lo que leí, ahí es donde hay más ambiente. En el puerto tenía que conseguir un taxi para el hostal, que estaba a media hora de camino. Hablé con un taxista y le pude rebajar el precio a 300 baht. Pensé que iríamos en una furgoneta, ya que me imaginaba que irían más gente del ferry a esa zona. Pero el taxista me llevó a su moto. No tenía muchas ganas de montarme en la moto con las dos mochilas encima, pero al final me monté. Esta vez el taxista si tenía un casco para mi. Con la mochila grande atrás y la pequeña por delante, me monté detrás en la moto. Ya noto que estoy cada vez más cómodo en la moto y me está gustando, pero al final tenía la espalda molida de cargar con el equipaje y agarrarme a la moto.
Hice el check-in en el hostal y me gustó mucho. Seguía siendo un dormitorio compartido, pero cada uno tenía su puerta que podías cerrar con llave y dentro podía dejar el equipaje al lado de la cama. Salí a la calle a almorzar y cogí el primer sitio que vi ya que tenía bastante hambre. Me pedí una pizza que se me había antojado al ver otras personas comérselas. Tras llenar el estomago, me fui a informar sobre un tour para el próximo día. En cada isla que he estado he hecho un tour de snorkel y aquí no podía faltar. También me informé en el hostal y al final lo contraté con ellos. Me fui a la habitación para descansar un poco.
Para la tarde/noche tenía ganas de un plan diferente y entretenido. Vi carteles por las calles de peleas de Muay Thai y pensé que sería un plan entretenido. Hace unas semanas ya lo estuve mirando por la parte de Krabi, pero al final no fui. El precio era de 1500 baht (unos 40 euros) para un asiento en la grada. Me lo estuve pensando y salí a cenar a las 20:00. Me pedí un pad thai y mientras que estuve comiendo decidí comprar la entrada para el muay thai online. El evento ya abrió las puertas a las 20:00, pero los combates no empezaban hasta las 21:30. Comí tranquilo y me fui al supermercado para comprar una botella de agua. Me fui andando al estadio que estaba solo a unos minutos del hostal. A las 21:10 entré en el estadio y cogí un buen sitio. Tenía ahí muy buena visibilidad sobre el ring. Al lado mía había una pareja sentada y empezamos a hablar. Sorpresa sorpresa, eran como no de Holanda. Un tío de dos metros de Rotterdam que le gustaba las artes marciales.
A las 21:30 empezó el evento. Pensaba que sería más enfocado para gente local, pero solo habían turistas. No obstante, me lo pasé genial. Eran 6 combates: el primero fue un ruso contra un tailandés. Pensaba que los tailandeses tendrían la ventaja, pero al final ganó el ruso por un k.o. técnico. La segunda batalla fue un tailandés contra un inglés. Esta fue la que más me sorprendió, porque el tailandés era mayor (parecía tener sobre los 40 años) y tenía una cara de ser profesional y con mucha mala leche. El inglés un chaval joven. La pelea parecía como una pelea de dos perros: el inglés un puppy con mucha energía moviéndose todo el tiempo y el tailandés el perro mayor lento y esperando dar el gran golpe. Al final el puppy cansó al perro mayor y ganó por k.o. técnico.
El tercer combate fue entre mujeres, una de Francia contra una de Tailandia. En este combate es cuando vi sangre. La tailandesa no paraba de dar codazos a la cabeza de la francesa hasta que le empezó sangrar la frente por toda la cara. La francesa tenía cara de ser muy joven y las dos aguantaron las 4 rondas. Al final ganó la tailandesa por decisión arbitral, lo cual no estaba yo muy conforme con eso.
El cuarto combate fue el más entretenido, un alemán contra un tailandés. El alemán parecía dominar completamente las primeras dos rondas, pero el tailandés le dio la vuelta y empezó a dominar. Cayeron unos buenos codazos y rodillazos, pero ambos terminaron de pie las 5 rondas.
El quinto combate no fue muy especial y estaba esperando el sexto y último combate. Normalmente en estos eventos la gran pelea es al final, pero sorprendentemente eran dos chavales jóvenes de Tailandia. Uno podía tener unos 14 años y el otro unos 19 años fácilmente. La pelea estuve interesante y el chaval de 14 años se veía potente. Tan potente que con una patada al hígado dejó al otro sin aire y con mucho dolor en el suelo. El joven de 14 años salió victorioso.
Una noche muy entretenida y la verdad que me gustó mucho. A lo mejor volveré ir a otro combate por el norte de Tailandia. Me despedí de los holandeses y volví andando al hostal para acostarme. Eran ya las 00:30 y mañana me espera el tour de snorkel por la mañana.