Ayer me acosté tarde tras haber estado actualizando el blog. Hoy me levanté temprano para desayunar en el hostal. Tras eso me metí un rato en la piscina y estuve mirando que hacer las próximas horas. Mi tren hacia Quy Nhon salía a las 13:30 y todavía tenía varias horas. Estuve pensando en ir a por un masaje, pero al final no me iba a dar tiempo. Vi que había un pequeño restaurante griego al lado del hostal y fui allí a almorzar. Tras comer, recogí mis cosas y me pedí un Uber moto hacia la estación de tren.

El recepcionista me había comprado el ticket de tren y pregunté en la estación si estaba todo bien para poder coger el tren. Todo correcto y tras una corta espera me monté en el tren. Me dijeron que serían unas 4 horas de camino, pero como siempre, tardó más. Mirando el ticket empecé a dudar si el recepcionista me había comprado el ticket correcto. Yo quería ir a Quy Nhon y en el ticket ponía destino final Dieu Tri, una ciudad al lado de Quy Nhon. Estaba confuso y ahora estaba dudando si tenía que bajarme en Dieu Tri o quedarme en el tren una parada más. En el mapa veía que había una vía de tren desde Dieu Tri hacia Quy Nhon.
El tren paró en Dieu Tri y todos los turistas se bajaron, lo cual tendría que haber sido una señal para mi. Le pregunté a un empleado del tren si el tren seguía hacia Quy Nhon y él me confirmó que sí. Decidí de quedarme sentado en el tren, pero no estaba del todo tranquilo. Veía raro lo del ticket y los turistas, pero pensé que sería también una experiencia diferente si me saliera mal la jugada. El tren salió de la estación y me puse a mirar por el mapa para ver si cogía la vía a la derecha o a la izquierda. Noté el movimiento de la curva y tras verlo en el mapa, me di cuenta que cogió la vía de la izquierda. Quy Nhon era la vía de la derecha. ¡Me había salido mal la jugada!
¿Y ahora qué? Tenía varios problemas. Primero, tenía poco dinero efectivo (unos 30 euros) ya que tenía planeado de sacar dinero en Quy Nhon. Segundo, todavía no había comprado una tarjeta sim y no tenía conexión al internet. Tercero, tenía una reserva de hostal en Quy Nhon. Vi pasar al mismo empleado del tren y le pregunté señalando al mapa Quy Nhon. Me miró un poco confuso y me preguntó el ticket. Al ver en mi ticket Dieu Tri me dijo que me había pasado de estación. Creo que cuando le pregunté anteriormente, él pensó que yo le estaba preguntado si esto era la parada de Quy Nhon. Otra explicación no le doy. Al final, fue una estupidez mía por no confiar en el ticket y en la salida de los turistas. Intenté preguntarle al empleado cual sería la próxima parada, pero no me entendía. Se acercó otro hombre y él me señaló en el mapa la próxima parada: Bong Son. Un pueblo a una hora de Quy Nhon.
No me quedaba otra que sentarme y esperar a que llegará a Bong Son. Cinco minutos antes de llegar a Bong Son pasó el empleado para decirme que me bajará en la próxima estación. Eran las 20:00 y me bajé del tren. La estación estaba vacía y me fui andando hacia el interior de la estación. Vi que había una conexión WiFi y pregunté a una mujer si me daba la clave. Me dio la clave y me senté a planear la noche. Mandé un e-mail al hostal de Quy Nhon para anular la reserva. Después me puse a mirar hoteles en Bong Son, pero no había nada disponible para hoy. Pensé en salir andando por el pueblo para preguntar en varios hoteles y pensiones que había visto en el mapa, pero no quería arriesgar de nuevo por la hora que era ya. Encontré un hotel a 17 kilómetros. Era lo único que podía contratar directamente con certeza y así fue. Me fui a pedir un Uber, pero nada. Intenté varias veces, pero sin resultado. Era normal que no hubiera Uber por aquí, ya que era un pueblo y no tenía turismo. Salí fuera de la estación y vi un taxi aparcado en la puerta. No me quedaba otra que hacer lo que menos me gusta: negociar precio. Por los precios en Grab tenía un idea, pero al final tuve que pagar un poco más comparado con Grab. Es lo normal.

Llegué al hotel y el recepcionista apenas hablaba inglés. Parecía que el hotel estaba abandonado, pero me daba igual. Quería mi habitación y descansar. En la habitación me puse a buscar como continuar el viaje, pero tuve problemas en encontrar algo online. Cené unos fideos que ofrecían en la habitación y me fui a dormir. Necesitaba descansar y mirarlo todo mañana con la mente descansada.