Ayer por la noche vi por Instagram que era el cumpleaños de Danielle. La felicité y empezamos a hablar y me preguntó si nos podíamos ver de nuevo, pero estábamos muy lejos del uno al otro en Vietnam. Pensándolo posteriormente, tampoco tenía ganas ya que tenía en mi mente a Justyna. Hacía dos días de que no había hablado con Justyna. No entendía muy bien el porque de su actitud y más tras dejar ayer por la noche un estado en Instagram con «nuestra» canción. ¿Una señal o coincidencia?
Esta mañana, harto de esperar y de querer tomar la decisión de ir a ver o no a Justyna en Bali, le hablé. Empezamos a hablar un poco, pero viendo que esto no fluía le dije que había tomado la decisión de no ir a verla. Sentía que ya no había el mismo interés por su parte y aunque ella me gustara, yo necesitaba a alguien que verdaderamente apreciará mi presencia a su lado. Yo no veía más razón de seguir estando en contacto y le deseé lo mejor.
Yo pensé que con eso terminaba todo, pero se sinceró un poco y me respondió. Me dijo que se acordó de mi ayer por la noche y que por eso puso el estado con la canción en Instagram. Que yo le gustaba, pero que no quería pasar de nuevo por una relación a larga distancia. Aparte de eso, ella también piensa que no somos compatibles para una relación. Seguimos hablando y volvió a ser la persona cariñosa que conocí, pero eso hizo hacerme dudar de nuevo de la decisión que tomé. No entendía o no quería entender el porque no vernos estas próximas semanas y no pensar en el futuro. Su respuesta fue que después sería más duro la despedida y aparte ella prefiere seguir viajando sola.
Ahora mismo estoy aquí sentado en una cafetería y escribiendo. No sé muy bien que pensar, pero necesito escribir para ordenar mi mente. Sigo pensando que es una mujer especial y diferente por la cual me hubiera gustado arriesgar. Pero si ella me dice que no, no queda otra que respetar su decisión. Me hubiera gustado ver que podría haber sido, pero me alegro de por lo menos haberlo intentado. No quiero quedarme más con la pregunta «¿y si…?». Tengo también cada vez más claro lo que quiero y lo que no quiero en una pareja.
Estuve varias horas sentado en la cafetería con el aire acondicionado. Hoy no tenía muchas ganas de andar por la ciudad y me volví al hostal. En el hostal me cogí la tablet y seguí escribiendo y organizando varias cosas más. Por la noche salí a cenar y me recogí temprano.