Hoy tocaba el tour de hacer snorkel por la costa de Koh Tao. A las 09:30 me iban a recoger en la puerta del hostal y allí ya había varias personas esperando para hacer el mismo tour. En el coche nos fuimos conociendo un poco. Nos llevaron a la oficina de la agencia para preparar todo y de ahí nos fuimos andando para el barco. El barco se llenó de gente y podíamos ser fácilmente 100 personas ahí. Me senté en un sitio y detrás de mí escuché decir a un chaval con su novia: “Seguro que esos dos de allí son españoles”. Me di la vuelta y le contesté: “Yo también soy español”. A partir de ahí nos pusimos a charlar durante todo el camino.
La primera parada fue en la parte noroeste de Koh Tao, en unas islas llamadas Koh Nang Yuan. Son 3 pequeñas islas que están conectadas entre ellas por bancos de arena. De aquí sale la foto típica anunciando las playas de Tailandia. Buena cosa también es que no dejan entrar en la isla con botellas de plástico para proteger el medioambiente. Nos dieron allí dos horas y con la pareja española y otra pareja alemana nos fuimos hacer primero snorkel. Desafortunadamente había mucho coral muerto por un tifón hace unos años. De todos modos, se podía ver todavía coral vivo a más profundidad. El agua cristalina hacía que hubiera mucha visibilidad y podía ver hasta una profundidad de 10 metros más o menos. Vi muchos peces y hasta vi dos peces grandes de un metro de largo cada uno.
Tras salir del agua me di cuenta que se me había olvidado de coger la crema solar. Me puse la camiseta para no quemarme y nos fuimos a subir la isla para tener vistas sobre las 3 islas. Tras una subida de 15 minutos llegamos a la cima y desde ahí pude hacer unas fotos muy bonitas. Tras bajar nos dimos un baño y ya nos tuvimos que montar de nuevo en el barco. Ahí nos dieron de almorzar y entre Alex (el español) y yo nos hartamos también de unas galletitas que estaban buenísimas.
La segunda parada fue en Mango Bay. Ahí me metí al agua con la cámara acuática y puse hacer varios videos. En la tercera parada nos pudimos tirar del tobogán desde el barco y pudimos explorar Hin Wong Bay. Ahí había que nadar bastante para llegar a la costa para ver los corales y peces. Este sitio fue muy bonito y disfruté mucho de la tranquilidad que me daba el agua. ¡Vi también de nuevo a Nemo, esta vez con diferentes colores!
La cuarta parada era Shark bay, donde se podían ver tiburones. Desafortunadamente no tuve suerte y no vi tiburones. Lo que si vimos aquí fue una tortuga grande que podía ser fácilmente más grande que un metro de largo. Lo gracioso fue que entre todos intentábamos estar cerca de la tortuga y eso significaba entre 15 personas nadar para poder hacer fotos o videos con la tortuga. Un agobio algunas veces la verdad.
La mejor parada fue la última. Me tiré del trampolín del barco y en el agua vimos dos tortugas más grandes todavía. Podían ser fácilmente igual de largo que una persona. Satisfecho por el día nos volvimos a montar en el barco y pusimos rumbo al puerto. Seguí hablando con la pareja española y quedamos para ir a cenar por la noche con la otra pareja alemana.
Al llegar al hostal, no tenía ganas de ir directamente a la ducha. Me fui a la playa para disfrutar del atardecer. Encontré un chiringuito chulo con un dj y ahí me senté viendo el atardecer con una cerveza y música chill-out del dj. Tras el largo día era esto lo que necesitaba. Estaba en la gloria y no tenía ganas de moverme de ahí.
Sobre las 19.00 me tuve que ir a ducharme ya que había quedado con los españoles. Al final la pareja alemana no venía y quedamos los tres para cenar en un restaurante. Pasamos un buen rato charlando y tras eso fuimos a dar una vuelta. De postre fuimos a por un helado y tras eso nos despedimos. Pensé en ir a tomarme algo, pero estaba cansado de todo el día y me fui a dormir.